Si te estás preguntando si aún tomando los anticoagulantes orales recetados por el médico es posible que se forme un coágulo de sangre, la respuesta es “sí”. Si bien este tipo de tratamiento minimiza considerablemente el riesgo de coagulación, no lo reduce a cero. Sin embargo, la buena noticia es que existen varias medidas que se pueden tomar para reforzar la efectividad de la medicación. Por ejemplo, tener un estilo de vida saludable acompañado de una alimentación variada en nutrientes y evitar el sedentarismo son algunas de las precauciones para disminuir los factores de riesgos asociados a las enfermedades cardiovasculares.1,2
Muchas veces hemos escuchado hablar de la importancia del “estilo de vida”, pero ¿en qué consiste? ¿cómo lograrlo? Sigue leyendo y toma nota de las siguientes recomendaciones:2,3
- Realizar actividad física ayuda en la prevención de las enfermedades cardiovasculares.
- Aprender a identificar qué alimentos son buenos para la salud del corazón y cuáles no, es el primer paso para organizarse en la compra del supermercado y así poder planificar una dieta adecuada. Poner en práctica menús diarios es una buena manera para reducir el consumo de comidas procesadas y, en su lugar, sumar más verduras y frutas.
- Leer las etiquetas de los alimentos donde se detalla la información nutricional es importante para evitar el consumo de las grasas trans, por ejemplo.
- Mantener un peso saludable es un aliado al corazón.
- Limitar la ingesta de alcohol.
- Evitar el tabaco, el cual es un factor de riesgo comprobado para el desarrollo de enfermedades cardíacas.
- Buscar herramientas para controlar el estrés.
- La sal es enemiga del corazón. Por ello, es aconsejable reducir su consumo evitando alimentos envasados y disminuyendo el uso de aderezos como salsa de soja, kétchup, mayonesa, etc. Para reemplazarlos y darle sabor a las comidas se puede probar utilizando distintas mezclas de especias.
- Bajar la cantidad de carnes altas en grasas eligiendo otras más magras con menos de un 10 % de grasa como el pescado o las aves sin piel. A su vez, es aconsejable usar menos mantequilla, margarina y grasa al cocinar.
Nutrientes aliados del corazón
Existen una serie de nutrientes que aportan un efecto positivo para la salud cardiovascular. Por ende, se recomienda mantener una ingesta adecuada de los siguientes: potasio, calcio, magnesio, fibra, proteínas, omega-3, selenio, probióticos, antioxidantes. ¡Considéralos en la dieta para proteger al corazón!4,5
Además, estos nutrientes tienen un efecto antinflamatorio, colaboran en la reducción del colesterol total, colesterol LDL y triglicéridos, contribuyen en el aumento del colesterol HDL y controlan la presión arterial. 2,3
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