El grounding, o también llamado earthing, consiste en la práctica de caminar descalzo sobre la tierra, hierba o arena para contactarse con la energía de la naturaleza a través de los pies. Los seres humanos, al ser seres eléctricos, actuamos como antenas, emitiendo y recibiendo energía. Nuestro cuerpo genera intercambios de cargas eléctricas constantemente y, en ellos, se producen iones positivos, y necesitamos de lo negativos (electrones) para mantenernos sanos. Cuando nuestra piel entra en contacto con la superficie de la tierra, absorbemos los iones negativos que nos faltan, ya que la naturaleza es una gran red eléctrica que los fabrica1,2.
Si nos sentimos cansados o con falta de energía, uno de los motivos podría ser el desequilibrio entre los iones positivos y negativos, lo cual puede desencadenar en una enfermedad1. ¿Y entonces? ¿Cuáles son las ventajas de esta práctica? ¡Sigue leyendo y entérate!
Beneficios del grounding
Las investigaciones científicas sobre esta nueva terapia indican que realizarla impacta en los siguientes aspectos2:
● Reduce la viscosidad de la sangre, un factor de riesgo en el desarrollo de aterosclerosis.
● Disminuye la inflamación y mejora la respuesta inmune.
● Mitiga el dolor.
● En deportistas, aminora el daño muscular y acelera la recuperación.
● Regula el sistema nervioso autónomo.
● Mejora el estado de ánimo.
● Equilibra varios procesos fisiológicos, como el control de la glucosa en pacientes diabéticos o la presión arterial.
● Genera un efecto positivo en la actividad eléctrica del cerebro.
● Mejora el sueño y reduce los niveles de cortisol nocturno.
Práctica del grounding
Se puede aplicar esta terapia de las siguientes maneras2:
● Caminar descalzo: ¡Anímate! Quitate los zapatos y camina en la tierra, el jardín, un parque o en la arena. Al tumbarte, estarás incrementando la superficie de contacto y el beneficio será mayor.
● Bañarse en la naturaleza: el mar es una excelente fuente de electrones como también lo son los ríos, lagos y aguas termales.
● Usar equipos de grounding: ¿Sabías que existen sábanas o mats para apoyar los pies mientras se trabaja que simulan la superficie terrestre? Se enchufan a la corriente eléctrica y transmiten energía.
Es una realidad que para quienes viven en ciudades, entre edificios, cemento y asfalto, es más complejo encontrar espacios verdes. Sin embargo, existen algunas alternativas para compensar el contacto con la naturaleza1:
● Poner una mano sobre el grifo mientras te cepillas los dientes.
● Quitarte los zapatos cuando estás trabajando o viendo la televisión, y colocar los pies descalzos sobre las patas de acero de una silla.
● Utilizar esterillas de yoga especiales para grounding para hacer actividad física.
Por último, la falta de electrones que produce vivir rodeados de dispositivos electrónicos, como ordenadores, tablets, redes de WiFi, teléfonos móviles, puede suponer un problema de salud. Por eso, una solución para compensar esta pérdida energética es recordar la importancia de conectar con la naturaleza y concretar ese encuentro1.